¡Hola a todos! Soy Lucas Biondi y estoy acá para hablarles de algo que, al igual que a mí, espero que les sorprenda cuando empezamos a entenderlo, se trata de la cantidad brutal de datos que entregamos cada día en internet.
Hace poco leí un artículo que me dejó pensando, Google Maps no solo registra por dónde manejás, sino cuánto tiempo te quedás en la panadería o a qué hora llegás a tu trabajo. Y no es solo Google, es Netflix, que ya sabe qué "preferimos" para darnos una mejor experiencia de usuario a maratonear antes que nosotros, o Spotify, que conoce nuestros gustos musicales a la perfección.
Apps "Gratuitas": El Intercambio Invisible que Hacemos
Empecemos por lo más básico, las aplicaciones que tenemos en el celular. Las descargamos porque son "gratis" ¿pero qué pasa si el verdadero precio es nuestra información? Es como el dicho, si no pagás por el producto, el producto sos vos. Incluso un simple juego, el que sea, registra cada movimiento que hacíamos, que luego se vende. Es una locura cómo esa data se mezcla con otras apps para crear un perfil de consumo hiperdetallado. Y no se trata de paranoia, más del 85% de los usuarios de smartphones usamos apps que registran y recopilan nuestra ubicación o nuestros contactos. Pensando de esta forma, ¿dónde queda la privacidad?
Redes Sociales: Cuando un "Like" Define Tu Vida
El Hogar Inteligente: ¿Nos Están Escuchando?
Por último, hablemos de esa sensación incómoda que nos ha pasado a todos: ¿nos escuchan? Nuestros dispositivos inteligentes (Alexa, Google Home, Smart TVs, relojes) son como pequeños espías en casa. The Verge afirma en un artículo que estos asistentes pueden registrar sonidos del ambiente incluso cuando no los estamos usando de forma directa. No es raro que después de una charla sobre viajes o recetas, los anuncios en el teléfono parezcan directamente sacados de esa conversación. Y ni hablar de los smartwatches, que tienen un mapa completo de nuestra salud, patrones de sueño y rutina diaria. Cada aparato con WiFi se convierte en un recolector constante de nuestra información. Es una cosa que asombra y preocupa a partes iguales.
Para Cerrar y Reflexionar
Al final del día, esto no es para que apagues tu celular, sino para que navegues con los ojos bien abiertos. Nuestra vida digital es la moneda de cambio más valiosa que tenemos. Entender cómo funciona este sistema es el primer paso para proteger algo tan esencial como nuestra privacidad.
¡Gracias por acompañarme en este episodio de Tu vida en línea! Soy Lucas Biondi, y nos vemos la semana que viene para conocer más acerca del mundo digital. ¡No te lo pierdas!




0 comentarios:
Publicar un comentario