Ética hay una sola

Un claro ejemplo de falta de ética fue lo que hizo un periodista estrella. Johann Hari, columnista de The Independent , fue acusado de plagiar sus notas periodísticas. “Me gustaría pedir disculpas de nuevo a mis lectores, a mis colegas y a las personas afectadas por mis acciones”. Con estas palabras intentó frenar las críticas. Las reacciones a sus disculpas públicas han merecido todo tipo de reflexiones y críticas en las redes sociales.
 Hari devolvió su premio Orwell, entregado en 2008. Además, de acuerdo con el mismo diario, el periodista se tomó una licencia de cuatro meses sin pago para emprender un programa de capacitación en periodismo por su propia cuenta. El columnista explicó su mala conducta profesional a la falta de formación ética. Llegó a admitir que había incluido citas de otros artículos y entrevistas para dar a los lectores “una impresión más precisa de sus pensamientos”. Se sabe que tomó párrafos de TheDaily Mail y que usó un seudónimo para responder a sus críticos en Wikipedia.



 A veces los periodistas buscan maquillar su trabajo copiando el material ajeno, y es ahí donde se pierde la ética periodística. En todo el mundo existen códigos de ética que regulan la actividad periodística. Estas normas tienen distintos alcances (respecto de las sanciones previstas, las autoridades de aplicación, etc), y son de diversos orígenes: algunas son autoimpuestas por organizaciones (de periodistas, internacionales, no gubernamentales, etc.), y otras están contempladas en el régimen jurídico de los Estados.
Los códigos de ética surgen de las situaciones de la práctica profesional cotidiana, y tienen como objetivo normalizar las obligaciones y los comportamientos a ser adoptados por los periodistas profesionales, así como sus límites, siempre y cuando estos no afecten el derecho de la libre expresión. Entre los códigos autoimpuestos pueden citarse como ejemplos los emanados de la Federación Internacional de Periodistas (FIP), de la Organización Internacional de Periodistas (OIP), de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), o de la UNESCO. En algunos lugares existen tribunales de ética cuya función consiste en la aplicación de sanciones a los periodistas que violan los códigos.
“Según el docente y abogado especialista en medios Damián Loreti, las distintas variantes que pueden adoptar los tribunales guardan relación con la existencia o no de colegiación obligatoria.”
Loretti publicó un texto “Sobre periodismo y periodistas”, en el cual explica las diferentes sanciones según cada caso. En Argentina existe un código de ética surgido del Foro de Periodistas Argentinos (FOPEA). El mismo no tiene alcance legal, sólo es “un documento de referencia” para sus miembros, que contiene una serie de artículos que a menudo son violados por ellos mismos. En Argentina no existe un Colegio de periodistas obligatorio, como sí existen en Chile, Colombia, Haití, Panamá, Venezuela y Costa Rica, donde por Ley deben anotarse los periodistas para poder ejercer la profesión.



Te presento un audio sobre Ética Periodística por Rayuela Radio.


...
Compartir:  

0 comentarios:

Publicar un comentario