Allá por la década de 1960 en Argentina se gestó un
movimiento cultural musical muy importante, que dio origen al Rock Nacional,
pero también a otros géneros como el melódico, el folclore, el pop y el blues
(entre otros).
El desarrollo de esta actividad estaba muy limitado por el escaso equipamiento que podía conseguirse en las casas de música: baterías, amplificadores y guitarras importadas eran inaccesibles, ya sea por su alto costo o por la escases producida por el cierre de importaciones.
El desarrollo de esta actividad estaba muy limitado por el escaso equipamiento que podía conseguirse en las casas de música: baterías, amplificadores y guitarras importadas eran inaccesibles, ya sea por su alto costo o por la escases producida por el cierre de importaciones.
La industria nacional de instrumentos musicales creció
muchísimo entre los 60’s y 70’s, en este artículo haremos especial énfasis en
la industria de las baterías. Las hubo de todos tipos y calidades: las más
básicas como Strikke Drums, Rex, Osmar y Omel eran difíciles de afinar y muchas
veces sus herrajes fallaban o se rompían; las que llegaron a los corazones de
los bateristas de la época sin duda fueron las Colombo y las Caf, ambos topes
de línea, codiciadas por los que pasaban por las vidrieras de la casa de música
Daiam y utilizadas por los grandes bateristas del Rock Nacional.
