Por Luisa Moreno
Buenos Aires, la ciudad con una de las avenidas más grandes de América Latina se ha convertido en los últimos años en un espacio de caos intransitable para los porteños debido a la cantidad de automóviles, colectivos y taxis que circulan diariamente.
Algunas de las causas se deben a la cantidad de marchas y protestas que se viven a diario en las calles de la capital originadas por diferentes grupos y piqueteros que se dirigen hacia los puntos centrales de la ciudad. Sin embargo y para estos casos, el transporte público como el Subte y el tren se convierten en la mejor opción para quienes deben llegar fácilmente a sus hogares y lugares de trabajo.
Dicha situación no solo se ve en Buenos Aires. Juan Diego Duque un estudiante colombiano, nos habla un poco sobre la visión que tiene de este problema tanto en Argentina como en su país de origen.
Por otro lado, es posible ver algunas deficiencias en dichas alternativas para evitar largas filas de carros en las avenidas de la ciudad. En esta ocasión, el deterioro de los vagones de trenes y subterráneos, la inseguridad para los viajeros y el mal estado de las vías se convierten en un camino peligroso para quienes optan por esta opción.
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